Un día como hoy en un accidente aéreo muere Jessica Carolina y Orlando Matos. Hecho conmocionó a los barahoneros.

 

 

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BARAHONA.- Quisimos recordar este episodio triste que consternó a la sociedad Barahona, con la intención de que no se olvide y que perdure en la memoria de los barahoneros y barahoneras.

Se trata de la muerte trágica de la joven Jessica Carolina, quien estaba a bordo del avión 587 de la compañía aérea American Airlines , el cual se estrelló en Queens de la ciudad de los rascacielos como es conocida en el mundo.

Un día 12 de noviembre del año 2001, hoy hace 19 años, cuando los barahoneros y barahoneras se dieron cuentan de la terrible noticia, de inmediato la tristeza los embargó, las lágrimas no cesaban de correr por las mejillas de quienes conocieron a la joven, o simplemente porque el hecho, les tocó en el corazón, aún sin conocerla.

También en la tragedia perdió la vida el barahonero Orlando Matos, mejor conocido como la fragancia, quien estaba radicado en New York en busca de mejores horizontes y bienestar para su familia.

El vuelo 587 de American Airlines se estrelló en el área de Queens a 1 minuto de despegar del Aeropuerto JFK matando a sus 260 ocupantes y a 5 personas más en tierra, siendo el segundo peor accidente en la historia de Estados Unidos, fue un vuelo regular desde el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy de Nueva York, Estados Unidos, al Aeropuerto Internacional Las Américas de Santo Domingo, República Dominicana.

Apenas un mes y un día después de los atentados del 11-S, un Airbus A-300 de la compañía American Airlines se estrellaba cuatro minutos después de despegar en una zona residencial de la ciudad de Nueva York, desenterrando el pánico y la confusión que vivió la ciudad tras el ataque contra las Torres Gemelas. Casi desde el primer momento todos los indicios sobre la tragedia, que costó la vida a 265 personas, reflejaban que se había tratado de un fallo mecánico, pero ha habido que esperar casi un año para conocer las conclusiones definitivas de la investigación, que indican que el accidente pudo deberse a la brusquedad del piloto a la hora de manejar el timón del aparato en una situación comprometida.

Aunque es doloroso recordar este episodio, es necesario recordarlo, para que la memoria de esos jóvenes, queden siempre en las mentes de los barahoneros.