Un vecino violó y asesinó niña de Higüey
SANTO DOMINGO. La Policía Nacional informó que fueron apresados Santos Cedano y Miguel Ángel Espiritusantos por la muerte de la niña Rosaidy Maite Gil Rivera, de 11 años, ocurrida en Higüey.
Durante una rueda de prensa, el vocero de la Policía Nacional, coronel Frank Durán Mejía, explicó que Cedano, mejor conocido como Ángel, de 32 años de edad, quien se desempeña como mecánico, admitió que violó y ahorcó a la niña.
Cedano habría manifestado que aprovechó que la niña pasaba por el frente de su residencia, momento en que la llamó y le pidió que le comprara un refresco en un colmado cercano. Narra que cuando la infante regresó, la invitó a entrar a su casa a llevarle el refresco y fue en ese momento cuando la agarró, la desnudó, la tiró al suelo, la violó y la ahorcó.
Una vez consumado el crimen, Cedano le pidió a Espiritusantos que le ayudara a deshacerse del cadáver de la niña.
Ambos procediendo a introducir el cuerpo sin vida en el vehículo marca Toyota Camry de color blanco, placa A014254, para trasladarlo a un campo de caña, ubicado en del distrito municipal la Otra Banda de Higüey, donde tiraron el cadáver.
Tanto Cedano como Espiritusantos fueron apresados mediante la orden de arresto 05497-2017 y se les ocupó el vehículo y un celular color negro/rojo que utilizaban para comunicarse.
El pasado dos de diciembre, la madre de la menor, Alexandra Rivera, denunció la desaparición ante las autoridades de Higüey.
Rivera había manifestado a las autoridades que personas que no habían sido identificadas se llevaron a su hija, en un carro y después de eso no la había vuelto a ver. El cadáver fue hallado en estado de descomposición en un campo de caña, ubicado detrás del ayuntamiento del distrito municipal la Otra Banda, en Higüey.
Según el informe forense, Rosaidy murió víctima de un shock hemorrágico por heridas de arma blanca a nivel del cuello y tórax. Sin embargo, el acusado del homicidio solo refirió que la estranguló.
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