11 de Septiembre 2011: 13 años después del peor atentado contra EE.UU.

En el día de hoy, 11 de septiembre del 2014, se conmemora el aniversario número 13 del peor atentado perpetrado por el terrorismo contra los Estados Unidos de América (EE.UU.). Todavía está fresco en nuestras memorias aquel fatídico día cuando un grupo terroristas secuestró aviones de pasajeros para atacar la tranquilidad de un país solidario, que abre sus puertas a ciudadanos de todo el mundo que escogen vivir y trabajar en esa gran nación.

Hace 13 años vimos con asombro y horror como estrellaron el primer avión contra una de las torres, un momento después se estrelló la segunda nave contra la otra torre. Luego supimos que otro avión se había estrellado en el Pentágono, en Washington, D.C. Una cuarta nave fue derribada por los pasajeros en Pensilvania, dicen que ese avión los terroristas planeaban estrellarlo contra la Casa Blanca.

Recuerdo que ese día, hace 13 años, me quedé mirando la televisión como si estuviera hipnotizado, como si estuviera paralizado por algo de fuerza mayor, como si un poder súper poderoso se hubiera apoderado de mi mente y voluntad. Luego vi como personas que ese día salieron de sus casas hacia el trabajo se vieron envueltos en la peor situación de sus vidas, eran parte del peor acto terrorista de la historia de la humanidad.

Vi como esa gente inocente, quienes nunca atacaron a nadie y su único crimen ese día fue salir a trabajar, fueron atacados vilmente en el lugar de sus trabajos. Los vi "volar" por los aires tratando de

escapar al calor inmenso que amenazaba con asarlos vivos, huyendo de eso terminaron saltando al vacío a una muerte segura. Al día de hoy los sobrevivientes de aquella masacre aun no se recuperan, familiares de los muertos siguen sufriendo la partida a destiempo de sus seres queridos. Familiares de los desaparecidos los siguen esperando como el primer día, aun sabiendo que nunca regresarán.

Alrededor de 3 mil muertos, miles de heridos, miles de rescatistas enfermos por los efectos secundarios de los gases y polvos que inhalaron en las labores de rescate. Producto de este acto terrorista la sociedad norteamericana y el mundo cambiaron para siempre. Estados Unidos se tambaleó, pero supo mantenerse de pie dando un gran ejemplo al mundo de fortaleza y dignidad.

Osama bin Laden pagó por su crimen como la rata que era, así murió, se le persiguió hasta que se le dio de baja como la rata que era. Estados Unidos de América sigue de pie y abriendo sus puertas a todo aquel que entre a ese territorio ha luchar por un mejor futuro, bueno, también se las sigue abriendo a sus

enemigos, aquellos que no nos quieren como país, que hablan mal de nosotros he inventan cualquier cosa para desacreditarnos. Hay gente viviendo y visitando ese país que actúan como nuestros enemigos, aunque reciben los beneficios del sacrificio de nuestros muertos en defensa de esa gran nación.

Estados Unidos debería ser un país para aquellos que creen en su sistema de gobierno, para los que nos respetan y creen en la mejor democracia del mundo. Los que no nos quieren ni respetan que se larguen al infierno. Mis respetos para los soldados norteamericanos que luchan cada día por conservar nuestras libertades, para los agentes que arriesgan sus vidas para mantener a raya el terrorismo, a los policías y otros que arriesgan sus vidas por nosotros, me quito el sombrero ante ellos y los saludo con el mayor de los respetos en este 11 de septiembre del 2014.

Fuente:HRCV